La "mala fama" que tenemos las mujeres al volante va quedando en el olvido. Sin embargo, hay imprevistos que muchas veces resultan en abolladuras como choques menores, roces con las columnas al estacionar o descuidos de terceros.
Pasos: 1. EVALUACIÓN
Lo primero que debes hacer es analizar los daños. Además de medir el largo, fíjate qué tan profundo es. Para ello puedes pasar tus dedos por encima; así comprobarás si son superficiales o profundos.
Después, procura limpiar muy bien antes de hacer nada más.
2. LIJA HÚMEDA
Una solución económica para quitar los rayones en la pintura es usar una lija de poco gramaje. Ahora, la clave está en comenzar en seco, y luego ir humedeciendo el área de trabajo. También es útil que lijes en el mismo sentido, pues de lo contrario sumarás otros cortes.
¿Cuándo detenerte? Al ver que las capas están niveladas. Cuando estés segura, procura secarlo todo con una toalla que no deje pelusas.
3. CERA PARA PULIR
En el mercado existen decenas de productos profesionales para tratar manchas y hacer pequeñas reparaciones en casa. Así bien, elige una cera o pasta especial para pulir y aplica una pequeña cantidad.
Hazlo en movimientos circulares y con suavidad. Continúa hasta que la zona que se ve más oscura se aclare.
Retira los excesos y espera algunos minutos. Para finalizar, puedes lavar el carro como usualmente lo haces.
