Luego de 72 horas del sismo de magnitud 7.1, en Puebla iniciaron las maniobras de demolición de las más de 9 mil 700 viviendas que reportaron autoridades estatales y federales.
En los municipios de Atzala y Tilapa, en la región Mixteca, con maquinaria pesada derrumbaron muros fracturados que quedaron en pie, pero ya representaban peligro para la población.
Sin la presencia del Ejército ni de elementos de Protección Civil, trabajadores removieron los escombros, pero también retiran muros fracturados que no cayeron luego del movimiento telúrico.
En Tilapa, las maniobras se concentraron en las viviendas en el centro de la localidad, declaradas con pérdida total por las afectaciones, que incluso generó nerviosismo entre habitantes.
En tanto, en el municipio de Atzala, donde fallecieron 13 personas tras la caída del techo del templo de Santiago Apóstol, más del 40 por ciento de las viviendas con problemas fueron demolidas en la jornada.
El Presidente Municipal, Alberto Ramos, informó que Protección Civil autorizó la demolición de viviendas para evitar que los pobladores mantuvieran sus actividades cotidianas dentro de los inmuebles, por representar alto riesgo para su integridad física.
"Ya comenzamos la demolición de casas y es por el bienestar de la gente, y cuando esto termine, ya veremos los apoyos", manifestó el Alcalde.
Con información de Agencia Reforma.
